miércoles, enero 31, 2007

Caliente y espontanea

El Hospital de Clínicas es lo más parecido al último nivel del Mario Bross. Ese en el que hay que ir por una especie de camino que es todo igual, tenes que saltar bolas de fuego y matar bichos bolita, todo para salvar a una princesa que solo se coje desde el 2000 cuando alguien invento un video XXX para darle un poco de onda.
La fiebre me llevo al funesto lugar, acompañada de un dolor de pecho causado por la ingestión de jugos congelados y mocos verdes pegados cual gomina a las paredes de mi garganta. Al no tener obra social me dirigí al sector guardia, donde las miradas de los médicos no ocultan su prejuicio: Todos los pacientes mienten y en realidad solo quieren faltar al trabajo…………………………………………………………………………….
Entre llantos de bebes, sabanas cagadas en tachos de basura y tres médicos que casi como un cumpleaños en verano, intentaban sentirse poderosos mientras gritaban: “No tenemos insumos! No podemos trabajar!”, me recibió el Jefe de Guardia. Alarmado por mi dolor de pecho, y sin poder ocultar su dislocación de mandíbula y globos oculares mientras veía las primeras tetas del día, el caballero me envió a… “La Guardia Espontánea”.
- Vaya por el pasillo, cuente hasta 4, sin respirar, de la vuelta a la derecha, amague pegarle a la enfermera, vuelva por donde vino, encuentre una C en el cielo y lea la Biblia de los pies del ascensorista. Ahí va a encontrar la Guardia Espontánea.
Para el momento en que encontré al sector C de la putisima Guardia Espontánea, ya había perdido la espontaneidad y hasta me sentía mejor.

- Antes de atenderse tiene que comprar un bono de cooperación para la consulta.
- Ahh… y si no traje plata para cooperar?
- Tiene que cooperar. Doble a la derecha por el pasillo mojado, déle la vuelta a la escalera de mármol que pronto va a caerse de podrida, cómase un pancho mientras saluda al paciente de la habitación 45 y mire a la esquina superior izquierda donde se prende una luz que titila. Ahí compre el bono.

Cuando encontré la caja, ya ni fiebre tenía. Siente pesos. Volví a la guardia con mejor nombre del mundo y esta vez me atendió un infante. Parecía un pendejo que había decidido jugar al doctor esta mañana y hasta había planchado su uniforme y se había peinado los pelos del orto con Poxiran.
El muchacho me pregunto muchas cosas incomodas como si tenia diarrea, si escupía verde y si la panza me cambiaba de tamaño. Realmente, si me hubiera sentido así hubiera ido a ver al Doctor Xavier de los X Men.
Ya sin fiebre, toqueteada por unos aparatos que bien servirían para motivar a una frígida y con unas ganas locas de levantarme y correr, mi doctor me informo que mejor volviera mañana, cuando me sintiera peor y tuviera alguno de los síntomas arriba mencionados, o vómitos, desmayos... cosas así, vio?
Le agradezco profundamente al doctor hijo de una hipopotama del Zoo de Buenos Aires, a la clínica del horror y a la guardia para gente selecta. Le agradezco al recepcionista hombre coya que me atendió y a la conchuda que me cobro el bono. Sin todos ustedes, la salud pública seria muy poco interesante…

lunes, enero 29, 2007

Una buena noticia

Muchas veces cuando uno comienza algo no espera ver frutos. Simplemente trata de reflejarse en lo que hace y de divertir a los que creen en el producto y eliminar a los que no con una motosierra. A medida que "Paseando por Buenos Aires" fue creciendo y recolectando lectores como Damibombombero y Juli que estan firmando desde el dia 1 hasta Cebolla, Daniela y cientos de anonimos que estan ahi esperando por cada actualizacion para reirse de la desgracia ajena.
Ayer domingo, mi tio Pepe, vestido con un delantal rojo y con evidentes marcas de estar sufriendo calor mientras se encargaba de freir una a una las berenjenas que serivirian de aperitivo para los fideos en lo de la Nonna, leia el diario en el momento en que yo llegue a la cocina:

- Meli, me parece que apareciste en el Clarin, eh...
- Pff... tio, no creo...
- Como era tu pagina? plog? blog? compl... como era?
- complicadaehisterica.blogspot.com, pero no me digas eso tio, que despues si no estoy me frustro para el carajo...
- Claro, ves? Si, aca esta.
- ......

Y ahi estaba. En la pagina 55 de la seccion Ciudad aparece en un articulo de Nora Sanchez titulado: "Buenos Aires tiene quien le escriba: el boom de los blogs sobre la Ciudad" y en su guia de sitios aparecemos los Paseantes, en un espacio de ocupa ni mas ni menos que los 33 caracteres del link.
Obviamente seguido al descubrimiento vino la ganancia para el diario ya que desde mi madre hasta la señora Antonia de la vuelta de la casa de mi abuela pasando por el verdulero, el fotocopiador y los leñadores de Caperucita Roja (acusados de violacion por el lobo cagado a palos), todos compraron el diario del domingo en la busqueda de tan grata sorpresa.
Mi abuelo ahora sabe lo que es una direccion hachetetepedospuntosbarrabarra. Puedo considerarme realizada.

No quiero extenderme demasiado en este hecho, pero quiero agradecerles a todos los que se hacen parte de estos escritos urbanos guarros y reveladores, ya sea leyendo, colaborando con grandiosas firmas, rebozantes de creatividad y de buenas energias... en fin, a todos lo que alguna vez pasaron por este blog y los que siguen pasando. Las buenas noticias como la que me zopapeo el domingo sirven de estimulo para seguir laburando, seguir paseando y seguir haciendo papelones publicos para luego narrar detalladamente.

Saludos Paseantes!

viernes, enero 26, 2007

No trabaje mas con lluvia

Los días de lluvia en la ciudad son causales de las mayores deficiencias laborales. Nadie, y cuando digo nadie, me refiero a ningún ser humano con un mínimo de vida social activa, nadie se merece tener que enfrentar ordenes, o dirigir una empresa de imanes, o marcar un código de 7 dígitos en la entrada de una oficina de mierda los días que llueve.
Muchos de ustedes habrán proclamado felizmente al Día Osvaldo, que lo único que hacia era extender la tortura de tendencia suicida de los domingos y agregar un domingo más, pero el lunes. Sin embargo, yo proclamo que cada día de lluvia sea un feriado pago. Que la lluvia, causal de muchas gripes y anginas cuando se mezcla con el aire acondicionado, causal de ropa arruinada, caras de orto y pelos con frizz, sea tomada como un impedimento para realizar tareas laborales y por lo tanto, sin previo aviso, si un ser humano se levanta y garúa, aunque sea una lluviecita poronga que no llega a empapar la calle, la cama volverá a recibirlo para un día a pura paja, comida y sexo desenfrenado.
Debería ocurrir también que el mismo Estado nos provea de media docena de facturas A ELECCION por cabeza para cada trabajador de Buenos Aires, que deberá llegar entre las 9 y media y las 10 de la mañana sin demora y deberá estar acompañada por un café con leche o un Nesquick.
La lluvia y el trabajo no son compatibles, y si le queda alguna duda, considere los siguientes factores:
Cuando llueve es un bajón bañarse antes de salir a trabajar. Es considerado "al pedo" por mas del 79% de la sociedad. Esto implica mayor olor a culo sudado en la oficina y marcas de grasitud en las cabeceras de los asientos del 124.
Ver la lluvia caer desde la ventada del trabajo es causal de meadas encima involuntarias y hasta diarreas o cualquier cosa que le haga ver al jefe que estas mal y debes volver a la paz de tu hogar para disfrutar del programa de Rial.
Llegar mojado al trabajo implica mayores posibilidades de infidelidad. Uno llega empapado, otro llega empapado... se secan en el pasillo... en el baño... garchan en el escritorio. Inevitable.
Si te despiden en un día de lluvia, es razón más que suficiente para declararle la guerra a tu ex empleador y cortarle las orejas y comerlas a la vinagreta.

Entonces, desde este humilde blog, pido sus firmas apoyando esta moción:

Feriado pago con facturas para todos cada día de lluvia! No nos dejemos engañar y mucho menos explotar! Unámonos contra el trabajo en condiciones extremas, unámonos contra la lluvia y a favor de mejores condiciones de trabajo para todos.


Y si aun tiene dudas, pregúntese a usted mismo: "Quiero trabajar con lluvia?"

miércoles, enero 24, 2007

Desde el piso se ve mejor

La costa argentina no deja de sorprenderme. No solo se puso de moda nuevamente el alquiler de ponnys desnutridos y al borde del ataque de diarrea por la ingestión de escarabajos envenenados sino que los medanos crecen y albergan cada día mas brotes de vidrio y basura y que la arena ya mas allá de blanca o amarilla, tiene un color sambayon dejado afuera del freezer con un toque de granizado otorgado por los forritos usados que decoran amablemente la superficie con semen recalcitrado.
El sol y el calor nos recibieron cual enema sorpresivo en medio de la noche y en menos de 3 horas ya el color frutilla en las pantorrillas logro un efecto Pinocho en mi caminar. Los pies quemados por la arena, hinchados y viéndose como en el paso previo a ser amputados por gangrena aun me queman y el cuero cabelludo deja entrever que ya empezó a pelarse por una especie de caspa muerta y constante que se le desprende cada vez que termino de peinarme.
Era sábado al mediodía. Auque los pediatras recomienden que uno no debe estar al sol en ese horario, si se pretende lograr un buen bronceado en 3 días, hay que hacer el esfuerzo y aguantar las ampollas. Alrededor de las 12 y media decidí salir con mi caballero de armas a comprar el almuerzo a un almacén cercano. Llevaba una malla roja que no se diferenciaba mucho del color de mis tetas, una pollerita de guerra para demostrar que no me depilo hace días, pero me la ree banco y unos anteojos que parecían haber salido del baúl de Moria Casan por su dorado penetrante. En un momento que no recuerdo, el almacén donde estábamos comprando fideos se volvió oscuro. Pensé: el sol me dejo medio boluda y por eso se me esta nublando la vista. Segundos después, un mareo. Volví a pensar: No estoy embarazada porque regularmente tomo mi pastilla anti bebes y además… estas vacaciones estoy parando en casa de mama, imposible tener sexo… Más mareo. Necesidad de salir a la calle.
(Momento en blanco que no recuerdo)
La secuencia, dicen los miles de testigos, fue la siguiente: Salí del almacén, se me veía mal y tambaleante. Caí al piso de cabeza. Me la di contra un cajón de cerveza. Me levanto un viejo, obvio, eso lo podría haber adivinado.
La ceguera momentánea me desespero a tal punto que sentí que podía cagarme encima sin siquiera importarme. Decenas de desconocidos me tocaban la cabeza como si yo fuera una virgen de los desvanecimientos en público. La cajera del almacén, lejos de reírse, estaba pensando: Se llega a morir esta turra acá en la puerta y me caga el día de playa. Mi novio, blanco, simplemente repetía sonriente: “Te queres matar te esta mirando todo el mundo!”. Este mensaje alentador sumado a la gente que me tiraba agua en la cabeza con intenciones de reavivarme cuando en realidad solo lograron mojarme, pasparme la entrepierna y casi ahogarme sentada, todas estas combinaciones hicieron que volviera a perder la visión por otros minutos. Una arcada me ataco, pero si vomitaba en la puerta del almacén iba a ser la causa de que cientos de personas no almorzaran y no quise tener ese peso en mi conciencia veraniega. Entonces me decidí a caminar a casa colgada como una sanguijuela ciega y paralítica al brazo de mi caballero. Camine descalza todo el camino plagado de vidrios y piedras sin sentirlo, tuve una revelación a lo Clark Kent y al entrar a mi casa se hizo la luz y la visión volvió a ser cotidiana (gracia dio!).
Toda esta funesta experiencia que afianzo mi relación con el carnicero y la cajera del súper, sirvió para que yo entendiera que Diego Torres es un hijo de puta, y que ir “por la vereda del sol” es una recalcada garcha de un pito corto.

jueves, enero 18, 2007

Ni rojo ni rosado: Paspado

Un fin de semana en la costa puede curar mi alma verde. Mar de Ajo me abrirá los brazos en la noche de este jueves y el domingo me pateara el agujero del orto quemado y ampollado y me regresara a la feliz rutina diaria.
Mientras pienso en el mar, en ese bello elemento componente de la playa que es la arena, el sol al que soy alérgica y que logra hacerme brotar e hinchar desde el clítoris a la vena que circula por mi dedo chico y lo conecta con mis pezones, pienso, pienso y solo puedo recordar trágicamente mis peores paspadas de culo.
Porque pasparse el orto no es algo simple, corto y rosadito. Es un proceso largo que comienza gracias a las piernas flácidas. Una camina por la arena mojadita y un pareo para que ningún pajero caiga de cabeza en un hueco de celulitis prematuro y mientras ubica un pie adelante del otro sabe que algo anda mal. Los “fofos” que nacieron en mi entrepierna para mi cumpleaños numero 15 se rozan unos con otros eróticamente compartiendo su blandura y causando algo así como unos granitos colorados. Cuando la arena seca y caliente se apoya sobre los granitos es cuando la joda arranca.
El rosadito del día 1 se transforma en un culo de orangután que no me ayuda para nada a marcar la diferencia entre mi vulva y la reciente paspadura.
Caminar es incomodo, salvo que tomemos una clase con Nazarena Velez y tengamos la habilidad de mantener las piernas abiertas causando una impresión de aceptación en el resto de los guardavidas de la costa.
De todos modos, al mismo tiempo que las chicas sufrimos la paspadura porque delata la existencia de los fofos, tenemos que comprender a los hombres. Ellos no solo se paspan en la entrepierna, sino que lo que comúnmente denominamos RAFE, la parte que une las bolas con el toor, se paspa, se hincha y el dolor es mayor que cuando tienen que cruzar al supermercado chino a comprar tampones. En adición a esto, las bolas que rozan con la maya, el calzón, la arena y la humedad que se acumula durante la secada post mar, también se paspan y causan un “rojor” en lo que seria el borde que une la ingle con las piernas. Dolor = No sexo.
Lo que comúnmente ataca a ambos géneros es la paspacion anal. Eso es a causa del mal secado luego de un extensivo lavado en el bidet, o justamente y gracias al mar mugriento argentino, la acumulación de agua al estilo otitis, pero en el agujero del culo.
Para todos estos casos es recomendable:
1- Contratarse un felino que pueda facilitarles chupadas negras curativas. Dicen que la saliva hace bien, pero si cada uno chupara sus propias partes seria el final de las relaciones de pareja. Lo mismo que si la Playstation tuviera vagina.
2- Evitar la arena caliente, caminar, el off y el perfume para olores íntimos.
3- Adquirir FarmX lo antes que se pueda y administrárselo sin moderación. Convertirlo en un untamiento corporal sexy entre los dos integrantes de la pareja. Nada mejor que garchar con un buen talco de por medio.
Felices Vacaciones para mí. Feliz paspada para todos.

martes, enero 09, 2007

Veo gente verde

Buenos Aires toda tiene resaca de fiesta. Las calles aun violadas por adornos y las lámparas montadas de estrellas de luz compradas al por mayor en Makro dejan un aire de melancolía que me llena los huevos que no tengo, pero necesito.
Una nueva generación creada para estas épocas esta copando la ciudad. Cientos de personas que viajan ahora mas cómodas en el 124 porque mas de la mitad de los argentinos han desertado a Mar del Plata. Es la población verde.
Pueden verlos en general caminando a sus respectivos trabajos como zombis por la vida, con humo saliéndoles de la cabeza y viéndose como si el sol no los afectara. El máximo contacto con el día que tiene una persona verde es durante la mañana, cuando va de puerta de su casa a la parada del colectivo. Si la persona viaja en subte, por lo menos presentara un color “rosachivo” que lo diferenciara del resto de los transeúntes.
El verano de los que nos quedamos es una gran y recalcada poronga de Chiche Gelblum. La tele apesta a películas de Telefe y a novelas para gente sin sexo. Osvaldo Lapport sin Soledad Silveyra no me llega al corazón y Mariano Martínez haciendo de ciego es… es… sin comentarios.
Las alternativas para un trabajador sin vacaciones son:
1- Ir a una pileta a nadar en meo de infante y encontrar monedas en el agua amarilla.
2- Ponerse un cohete en el orto, viajar un fin de semana a la costa, gastar lo mismo q si hubieras ido quince días, volver sin ver el mar porque llovió como el carajo y estar mas estresado que si te hubieras quedado en casa succionándole los parásitos del culo al perro.
3- Tirarte en la terraza como una ballena verde cuando volves del laburo. Llevar una botella de agua para no deshidratarte y una radio que solo agarra la radio de Once. Deprimirte por lo triste que es lo que estas haciendo y volver al living a jugar al solitario.
4- Tirarte en la plaza cerca de la Bond Street acompañando a los acostados de siempre, un par de vejestorios en bolas que demuestran que tienen huevos venosos y corajudos como para absorber no solo el sol sino la mierda de las palomas, los gritos de los caminantes, de los camioneros y de los paseadores de perros.
Ahora, cuando las opciones no nos satisfacen y ser una persona verde se torna doloroso, poco estético y similar a Romina Yan, es buen momento para preguntarse: Quiero renunciar? Si la respuesta es positiva, es momento de empezar a planear una vacaciones en Chascomus para pescar bagres y cagar en el mismo baño que cientos de chascomuseces, si es negativa… comprate una lona ya mismo, el balcón te esta esperando.

lunes, enero 08, 2007

Visiones del mas alla

Mi cuerpo esta entumecido a causa de demasiado movimiento. El fin de semana, lejos de cumplir su rol relajante, se encargo de depositar en mi miles de millones de partículas de alcohol que aun pueden olerse en mi toallita diaria. La menstruación ya finalizada dejo bien en claro que el Ibu evanol y los daiquiris no deben tomarse juntos y mi pelo escupidor de frizz desmitifico la idea de que el shampoo de Sedal define las ondas.
Domingo a la tarde, los Reyes ya pasaron, no queda mas alternativa que esperar que Pascua llegue pronto para indigestarnos y cagar agua de chocolate por los ojos. El paseo por Buenos Aires me traslado al balcón de mi casa. Mi jardín de plantas muertas a las que recientemente y con motivo de mi cumpleaños se sumo una aloe vera próxima a morir también, me recibe con papas fritas en el piso y una reposera que permite ver bien en detalle toda la vereda de en frente en la que sin dudas se destaca el supermercado chino.
Mientras intentaba deducir la relación entre cada uno de los 37 chinos que viven en el súper y procrean en menos tiempo que el resto de los humanos no amarillos, algo llamo mi atención. Algo hizo que mi tarde fuera una tarde pum para arriba. Un taxi estaciono y de el bajaron 2 personas. Un hombre y una mujer. El hombre era flaco, cuerpo de garza, cara de imbecil y ropajes caros. La mujer, rubia, de pelo ondulado y con un rostro que dejaba ver lo bien que seguramente se relacionaba ella con el órgano masculino no solo de este caballero, sino de cualquier macho caminante de todo el Club Atlético de Defensores de Belgrano. Vestida con una pollerita de jean, esta dama permitía aclarar las dudas con respecto a como se veía su raya del culo (demasiado marron ehh), era ni mas ni menos que... Claudia Albertario.
Desde mi balcón sentí la necesidad de delatarla, de que todos los extranjeros de la calle Corrientes supieran quien era esa mujer que se robaba las miradas de los carritos de botellas. La mire, la observe minuciosamente, tan minuciosamente que ella me miro también. Y ahi estábamos. Yo en mi balcón, ella en la vereda, mirándonos con odio, con ganas de quemarle los rulos, hacerla gritar “uy como estoy” y verla ahogarse en una palangana llena de acondicionador de pelo para concha de camello.
La vi besarse con esa larva esbelta, la escuche hablar a lo lejos y luego la vi partir. Se llevo su fama, su fortuna y sus tetas dispares. Claudia Albertario cambio mi tarde. Gracias.

martes, enero 02, 2007

2007

Se acabo la joda. Los supermercados ya están preparando stands con ofertas relativas a pan dulces, la sidra esta fermentando en la terraza donde la olvidaste del pedo astral que te tomo por sorpresa después del cuarto brindis de las 00:20 y la ensalada rusa de papa que comiste durante dos días seguidos te pide por favor que la tires de una vez por todas porque ya la mayonesa parece sabora y los hongos son fácilmente comparados con apio.
Un nuevo año. Otra vez lo mismo. La misma cantidad de días salvo que sea un año bisiesto (de esto solo se acuerdan aquellos que cumplen el 29 de febrero… infelices). Cada primero de enero completamos el mismo ritual pelotudo de "que se vengan cosas buenas" cuando en realidad todos sabemos que el martes 2 vamos a volver a hacer lo mismo que siempre, con un poco mas de resaca, rodeados de los mismos forros laborales y con el culo igual de apretado que cada enero, pero esta vez, con mas calor y olor a vino.
Otro deseo típico es por viajar. Para eso la gente corre alrededor de una mesa con una valija. Yo me pregunto... hay que ser pelotudo ehh, pero mas forro es aquel que se siente renovado por el espíritu de las fiestas, ese espíritu que todo el resto de la sociedad perdió en el momento en que el Doctor K anuncio asueto para el 22 y el 29 cuando en realidad lo necesitábamos el 26 y el 2. No acepto que nadie se haga el despierto, el enérgico, en un día tan de mierda como hoy. El colectivero escupe caramelos confites, el chino del súper que no tiro ni un petardo tiene mas ojeras que un vendedor de chasqui bum y encima que el clima es una mierda, nos tenemos que bancar que el noticiero muestre felizmente como en Australia tiraban robots cagadores de luz de vida y nosotros quemamos muñecos en La Plata llenos de los originales tres tiros para crear el clima festivo post brindis.
Ahora queda reyes, la fiesta más inútil después del día del ahijado. Todos los grandotes poniendo botitas rojas con pasto y agua cultivadora de dengue en cada patio de cada casa del mundo. Lo más deprimente es que a causa de esta fiesta, mi cumpleaños pasa a segundo plano, casi inadvertido, como si el 5 de enero fuera una mera excusa para llegar al 6.
Y una vez que pase reyes... queda esperar Pascua, pero hasta entonces simplemente relájate y goza diría algún positivo relajado, gente que odio.
Ojala se les cumplan los deseos, vomitemos pan dulce y usémoslo de desayuno hasta que escasee nuevamente. Que este nuevo año les permita desencarnarse los pelos del orto y cultivar plantas carnívoras.
Feliz 2007 para todos.