sábado, noviembre 18, 2006

Juicio y castigo

La mañana me sorprendió a las 9.10. Mi pelo apestaba y chorreaba caspa de las puntas florecidas cual huerta en primavera. Algo no estaba bien, pude sentirlo en el aire porteño… era mi muela de juicio.
Uno piensa: son 4, por que no salen todas juntas? El dolor seria inaguantable, pero tendríamos la certeza de que NUNCA vamos a volver a sentirlo. Pero no. No es así. La muy hija de un camión africano de prostitutas gratuitas empieza a puntear en la esquina de mi maxilar inferior y yo siento una punzada en el cerebro que se extiende por toda mi cara dejándola tan dura como las bolas de un pajero.
Así, con la cara tiesa, el pelo sucio y sin ánimos de usar zapatos, me fui a trabajar. Me calce las zapatillas aprovechando que no venia mi jefe y un pantalón que me entra desde que mi mama dice que soy anoréxica.
Son las 8 y 40 de la noche y ya me colé unas 4 aspirinas. Los dolores de la gente sin obra social son fáciles de automedicar: si te duele la cabeza es aspirina, cafiaspirina o tafirol. Si te duele la panza son mimitos o un pedo y si estas con vómitos anda a llorarle a la Mujer Maravilla.
Hechos que sucedieron al dolor de muela:
Un morocho intento lustrarme las zapatillas por $3.50. Ese es el precio porque usa la lengua y liquido preseminal para que queden brillosos.
Robé tronquitos de atrás de la pizza porque la extrema pobreza no me permite comprarme almuerzos. Los escondía detrás del teléfono para que nadie los viera. En un momento el asco me sobrepaso cuando mordí una parte que tenia agüita de saliva verde.
Me descubrí número 59 en un ranking de blogs… horas más tarde 60… luego 61 y ahora…. Ya no estoy más.
Di un paseo con el plomero. Le mostré la canilla goteante, la cadena disfuncional con pequeños rastritos de mierda en el inodoro. A cambio, él me enseñó un método para que no gotee el agua que seguro aprendió en la cárcel de caseros donde cayo condenado por violar a una dama bajo una ducha sin arreglo.

Hoy más que nunca… qué placer vivir en Buenos Aires.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

note cierta oscuridad en este relato, por que?

Anónimo dijo...

hija de tu mama santa!
me cole 4 aspirinas bestia drogadicta?suena como el orto....anda al dentista.......
yo me doy cuenta q entro aca y me dan tantas ganas de putear!!!!!!

gracias sos un lugar de descarga....como me cago de risa de tus infortunios q mala amiga q soy
te amo te amo te amo!!!!