lunes, marzo 26, 2007

Del cielo con amor

Calor, mucho calor.
Suena una voz de la ultratumba:

"Les comunicamos a los señores pasajeros que el servicio de la Lìnea D se encuentra momentaneamente DEMORADO"

Las miradas entre pasajeros se mostraron frìas y un tanto claustrofòbicas cuando las puertas del subte se cerraron, la bebida comenzò a escasear y los minutos pasaban. El pensamiento inicial era el de aguardar a que la poronga tiesa se dignara a volver a su funcionamiento, tal como se habìa anunciado segundos antes. Cuando la cerrada espera superò la media hora, algo dentro de alguien hizo un ruido sin llegar a ser un gas y demandò que algùn responsable se hiciera cargo de la situaciòn.

"Les comunicamos a los señores pasajeros que el servicio de la Lìnea D se encuentra momentàneamente INTERRUMPIDO"

Quiero manifesar mi compasiòn por la familia del chofer del subte y del Director General de Metrovìas, a quienes no solo les zumbaron las orejas, las bolas y se les dilataron las pupilas, sino que les recordaron el odio a sus conchas maternas y abuelìsticas de forma ininterrumpida a lo largo de 20 minutos.

"Los pasajeros que asì lo deseen, podràn reclamar el dinero de sus boletos en boleterìa, presentando el ticket que medio subte tirò y la otra mitad se metiò en el medio de los cantos del orto pensando que jamàs iba a necesitarlo"

Claro, sencillo tema, total, solo somos 250 mil personas arriba del subte del horror las que tenemos que reclamar. O sea que si ahora son la 19:05 de la tarde, calculale que me devolveràn mis $0.70 a eso de las 3 de la mañana, cuando ya tenga las tetas aceitadas de tanto esperar. No, gracias. Prefiero que me caguen los centavos y que Jebùs castigue al locutor.
En la estaciòn Aguero, el mar de personas chivadas saliò a la superficie cual lava en Volcano, cada uno sacò su Guìa T y definiò còmo llegar a su destino. Toquetiè mi bolsillo y la cruda verdad se hizo presente: En mi bolsillo vivìa la nada. Cero pesos. Cero centavos.
El mapa mostraba que para llegar a mi hogar, la distancia era de aproximadamente 28 cuadras. tenìa calor corporal, indignaciòn hacia las viejas y los niños recièn salidos de la escuela. Era como la bruja de Blancanieves, pero con màs frizz y en lugar de un espejo, tenìa una mochila pesada dispuesta a partirle la cabeza a cualquiera que impidiera a mis pies movilizarse con normalidad por Figueroa Alcorta.
Empecè a caminar. Una, dos, tres cuadras, cinco cuadras, basta. Venìa del trabajo, venìa del 60, de caminar mil cuadras hasta Panamericana para subirme y estar parada como las tetas de Claudia Ciardone... basta, no more walking.
Me parè en una esquina como una prostituta conocedora del oficio, esperè por un taxi, pero no cualquier taxi, sino por uno que estuviera dispuesto a llevarme gratis, sabiendo que no poseìa ni un cobre en una muela y que si querìa su dinero iba a tener que esperar en la puerta de mi casa hasta que yo subiera, agarrara y bajara a llevàrsela, corriendo el riesgo de nunca volver y convertirse en la leyenda urbada de "el taxista que esperò por siempre hasta convertirse en asesino de deudores y estudiantes de Periodismo".
Dos taxis no quisieron jugar, hasta que llegò un señor catòlico que para ser aceptado en el cielo me subiò, me consolò y me dejò llorar mis penas subterràneas mientras èl me ponìa como ejemplo de la juventud argentina.
Lleguè a casa, estacionò en la puerta, subì, bajè, paguè y el dìa ya habìa caducado. La noche caìa sobre Buenos Aires, la humedad me forzò a bañarme y la bombacha sudada fue el souvenir que quedò marcado en el asiento catòlico, esperando algùn otro culo que se le siente encima, lellore al conductor y disfrute de Buenos Aires, del subte y sus trenes maravillosos.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

creo que el tema del transporte ocupa una porcion gigante de tus desgracias, es tu karma mel, es mas; vas a reencarnar en boletero de subte o colectivero castigador para vengar a todos tus coviajantes.Es todo, me despido

Chelo dijo...

Mejor no nos detengamos a pensar q viajmos en un tren subterraneamente x el cual corre el 5% del oxigeno q deberiamos respirar. Eso sin contar q la no ventilación no solo nos hace ver elefantes rosa en las paredes oscuras devenidas en paisaje,sino q todos los aromas corporales propios y ajenos conforman un coctel q knockearia al tembloroso Muhamed Alí. Bondi: lento,caro,incómodo,jamás viene el q esperas y requiere buena visión para distinguir entre uno de linea y un escolar(si tienen la desgracia de parar uno de estos moviles naranja,hagan lo posible para subirse y escapar de la mirada de los q estan en la parada).Subte: todo dicho x ti,compa de facu. Tren:todo esta bien si venis desde o hacia el norte, o si a nadie se le ocurre acabar con su existencia en hora pico.

Saludos

Santi dijo...

Sin duda a vos lo peor que te puede pasar es viajar. Pero... por lástima estas obligada a hacerlo. Así que mel, a ponerle el pecho a el sistema de transporte público.

Igual tengamos en cuenta que todavía queda gente buena, como tu tachero o.. como el colectivero que me toco anoche, que en medio del diluvio le pedí que me abra en la esquina de mi casa y con gusto accedió.


saludos

r.- el corre ambulancias dijo...

a veces me dan verguenza las carcajadas que me sacan tus desgracias causadas por los medios de transporte

pero como me gustan tus puteadas

Fernando dijo...

Estás condenada a viajar mal, Mel, será que en tu vida anterior fuiste guarda de tren y bajaste a muchos pibes sin boleto?

Salu2!

Anónimo dijo...

¡hola Mel!Espero que esto llegue, me he cansado de escribir, de todas las formas y no puedo llegar a vos, te digo que me recopa tu léccico, me mato de risa y siempre me alegras el día, siempre espero tus desopilantes notas; te envío muchos cariños: kukilin
PD.Ahora empiezo a padecer para enviarlo....

Matt. dijo...

AAAAAAAAAAAAAH!!

por dios...

inmenso placer leer este blog.


saludos mujer.. que andes como tengas que andar...

bien, pero con demoras.
XD


saludos.

Julián Torrado dijo...

te confieso una idea que tengo hace muchisimos años y espero poder cumplirla. Llevarme en el bolso, morral, mochila, donde quepa, un control remoto universal. De esa manera, ya que te tenes que comer una cantidad de tiempo indeterminada esperando al gusano subterraneo, al menos no te perdes la novela, o el noticiero, o alguno de esos programas de utilisima.
tenelo en cuenta =P

besos!

Leonardo Ferri dijo...

Te acompaño en tu bronca. Pero como hablamos ayer, siempre hay alguien que está peor (consuelo de tontos).

la doctora yvonne dijo...

Muy divertido tu post, como siempre, con sus detalles escatológicos de bolas, sudor, bombachas, tetas aceitadas... Y además, súper ilustrador de las ciudades latinoamericanas. saludos!

Los isleros dijo...

quizas haga mucho tiempo que estoy por aca, por eso la cautela de mi pregunta...
No tenes tarjeta de debito?
BESO!!!

tiopepe dijo...

Hola Meli!! fenómeno tu escatológico relato.
De cualquier manera y para que no te sientas tan para el upite, no sólo vos padecés con los viajes.
Pensá en todo aquél mortal que debe concurrir a sus labores desde el Sur o el Oeste en horas de la mañana. Las Utopistas son un río inmundo de autos, camiones, colectivos, catraminas y otras yerbas que encima se le ocurre chocar (los muy hijos de puta).
Otros, como el que escribe esto, debe desarrollar su laburo por la zona de La Matanza, Laferrere, Catán, San Justo (que dandi ehhhh!!!).
Los pozos mas chicos son como el cráter del volcán Etna y si llueve el auto te navega.
Seamos positivos!!!!
Por lo menos respiramos gratis (por ahora)
Besos de tu tío que te quiere mucho