jueves, diciembre 17, 2009

Araña en la Pared

¡Oh por Dios!: Una araña en la pared.

Seis centímetros de largo,
patas flacas y es marrón

Se encuentra arriba de la puerta
mirando al techo con firmeza
y moviendo sus carnitas con dolor

Está a dos metros para arriba
y yo sin raid ni red,
tampoco un buen insecticida
que la queme como a un papel

Entonces una idea
de palo, elástico y ojota.
Esta última encadenada al primero,
pegoteados por un nudo fabricado con el segundo:
un aplasta arañas de pared.

Y salto y golpeo y erro
Y marco un cuarto creciente color gris en la pared

Y salto y golpeo y erro
y el bicho del infierno se mueve;
me cubro la cabeza y pausa.

Y ahora sí:
salto y golpeo y aplano
achicharro, desprendo y mato
a mi araña en la pared.

Cae rendida en una bolsa,
con sus patas entregadas,
el cuerpo frío... sí. Murió.

Una servilleta y un coraje,
la entierro entre los dedos,
(el papel amortigua el tacto)
y a su tumba la regalo,
en el tacho, en la cocina,
en lo más alto de la bolsa.
Chau araña del infierno,
chau mi bicho en la pared.

2 comentarios:

Unknown dijo...

jajaja muy bueno!! Tiene ritmo y todo, me encantó!

ferusska dijo...

Que linda y rítmica manera de relatar la muerte de una pobre araña! Me encantó!